La ex edil, Margarita Arellanes, se salvó de una más ya que obtuvo una suspensión al amparo que solicitó su defensa en contra de la vinculación a proceso que le dictó un juez de control en julio pasado.
Monterrey.- Desde que la ex alcaldesa Margarita Arellanes dejó su cargo ha dado mucho de qué hablar, desde lujosos gustos, costosas propiedades y más recientemente desvío de fondos millonarios.
El delito imputado a Margarita y a ocho de sus ex colaboradores se trata a un desvío de 8 millones 207 mil 546 pesos que le reclama el municipio que representó, mismos que se utilizaron para pagar los servicios jurídicos a un despacho usados después de su mandato.
Los ex funcionarios son Luis Ángel Torres Garza, Aldo Ariel Cepeda López, Irasema Arreaga Belmont, Jesús Guadalupe Hurrado Rodríguez, Julián Hernández Santillán, Alejandra Rodríguez Guerrero y José Francisco de la Cruz Suárez.
De acuerdo a la resolución del juez cuarto de distrito en materia penal del Estado de Nuevo León el día 14 de noviembre, se deberá reiniciar todo el juicio contra los ex funcionarios y Arellanes, el proceso deberá reponerse bajo los criterios que señala el Código Nacional de Procedimientos Penales y no en base a la legislación local.
La juez de control Alejandra Gutiérrez avaló la decisión de abrir un juicio oral en contra de Margarita Arellanes y ocho ex colaboradores de la administración regia por la presunción de delito en la contratación del despacho Roberto Martínez Abogados.
Sin duda alguna Margarita Arellanes se salva de nuevo de pagar los platos rotos que dejó después de su mandato, sumándose a la lista de ex alcaldes absueltos por detalles como falta de pruebas o irregularidades en el proceso.
Desafortunadamente este tipo de hechos solo deja mal parada a la justicia en el estado, que a pesar de las pruebas irrefutables, siguen haciéndose de la vista gorda ante la corrupción que se vive en sus principales puestos internos.