Para evitar que los excedentes presupuestales puedan ser reasignados a voluntad del Ejecutivo, lo que se puede prestar a una poca transparencia en el uso de estos recursos, Marco Antonio González, solicitó reformar los 40 y 41 de la Ley de Administración Financiera para que el uso de estos remanentes sean autorizados por el Congreso.
Adicionalmente se establece que el Ejecutivo podrá acordar la reducción de una o varias de las partidas contenidas en los programas previstos en la Ley de Egresos, cuando haya una contracción en la Hacienda Pública, cuando no se perciban los ingresos estimados o no tengan los fondos necesarios, sin embargo deberá tener una previa autorización del Congreso del Estado.
“Antes de que existiera la Ley de Administración Financiera, el Ejecutivo podía utilizar todos los excedentes en recursos obtenidos de manera discrecional, los excedente obtenidos, con la Ley de Disciplina Financiera ya marca que el 50 por ciento de los excedentes se va a deuda o pago a proveedores y el otro 50 por ciento el Ejecutivo tiene toda la disposición de manejarlo de manera discrecional».
«La que estoy proponiendo y celebro que todas las bancadas se sumaran, es que el segundo 50 por ciento del excedente tenga que ser autorizado por el Congreso en qué rubros se pueden utilizar, de esta manera cerramos el capítulo del presupuesto donde el Estado y el Congreso lo hacen conjuntamente pero ya deciden todos los recursos excedentes a donde se van a destinar», señaló Marco Antonio González.
Señaló que los excedentes de este año fueron alrededor de 7 mil millones de pesos, y de acuerdo a la actual ley, el 50 por ciento de esos recursos fueron para deuda y el resto usados a manera discrecional por el Estado.
Marco Antonio González destacó que con esta reforma se da claridad al destino de estos recursos, los cuales ya no podrán ser utilizados sin la autorización del Congreso a partir del siguiente año.
Agregó que se cierra un ciclo en la nueva forma de hacer el presupuesto en Nuevo León, pues primeramente el líder de los Diputados del PRI, Marco Antonio González impulsó y logró una iniciativa para que el presupuesto estatal sea diseñado también por el Poder Legislativo y no solo por el Gobierno del Estado.
