En un partido para el olvido debido a un mal primer tiempo, Tigres logró rescatar una victoria crucial sobre Mazatlán con un marcador de 2-1 en el Estadio Universitario, ante una multitud reunida para el Viernes Botanero.

En los primeros 45 minutos, Tigres se vio frustrado por la sólida defensa de Mazatlán, que utilizó un bloque defensivo con tres centrales. Sin embargo, en la segunda mitad, el técnico serbio realizó cambios estratégicos decisivos, incluyendo la entrada de Carioca y Gignac. Esto llevó a reajustar la formación, moviendo a Pizarro a la defensa central dejando su lugar Diego Reyes. Esta modificación táctica resultó clave, ya que Tigres encontró espacios y oportunidades claras de gol, con espectaculares anotaciones de Chuy Garza y Fernando Gorriarán desde fuera del área.

A pesar del descuento de Mazatlán por parte de su defensa central Merolla, Tigres logró mantener el control del juego hasta el final, con intervenciones decisivas como la atajada de Nahuel Guzmán al minuto 88 y un disparo al travesaño de Gignac en el minuto 90.

Con esta victoria, Tigres suma su segundo triunfo consecutivo en el inicio del torneo, alcanzando un paso perfecto de seis puntos de seis posibles. Su próximo desafío será visitar a las Chivas de Guadalajara, consolidándose así en el liderato de la tabla general.

En la conferencia de prensa posterior al partido, el técnico felino evitó hablar sobre los movimientos de jugadores, dejando claro que los anuncios oficiales serán realizados por la directiva en los próximos días.

Este análisis detallado del partido ofrece una visión equilibrada de los momentos clave que definieron la victoria de Tigres, resaltando la importancia de las decisiones tácticas y las actuaciones individuales que marcaron la diferencia en el campo.