La última fecha de la temporada 2015/2016 de la Premier League se vio manchada por una amenaza de bomba, el partido entre Manchester United y Bournemouth no se pudo disputar y solamente se jugaron 9 partidos de los 10 programados por fecha.
La policía decidió evacuar Old Trafford, casa del Manchester United y suspender minutos más tarde en definitiva el partido por precaución. Luego de la investigación, se dio a conocer que fue un artefacto que se había usado en un simulacro el causante de la movilización.
«No tomamos estás decisiones a la ligera», afirmó John O’Hare, asistente del jefe de policía de la región de Gran Manchester, que afirmó que expertos militares se sumaron al operativo policial para lidiar con la alerta de seguridad. La evacuación de Old Trafford se produjo pocos días después de que el Gobierno británico decidiera aumentar su nivel de alarma por posibles atentados terroristas de grupos norirlandeses de «moderado» a «considerable». El tercer nivel de amenaza terrorista en una escala de cinco significa que existe una «gran posibilidad» de que se produzca un ataque en el Reino Unido, según señaló la ministra británica de Interior, Theresa May, el miércoles.
Todo se agrandó más por los lamentables ataques terroristas ocurridos recientemente, primero en Francia y luego en Bélgica. El hecho en Francia está conectado directamente con el fútbol pues es donde se llevará a cabo la próxima Eurocopa en el verano. Las autoridades han dicho que se tomarán la máximas medidas para que no pase nada en el evento.
El Manchester United se jugaba un posible pase a la próxima Champions League, pero el Manchester City empató ante el Swansea, los rivales de ciudad tenían que perder su último partido para que el United ganando entrara a la máxima competición de clubes en el mundo, no ocurrió así.
El partido será jugado el día de mañana.
