Hoy día, la afición de Rayadas no podría estar mas orgullosa. Lo vivido el lunes no fue un campeonato cualquiera, tuvo todos los ingredientes que convierten un gran triunfo, en una hazaña histórica.
Cuando Katty Martínez fichó con las Rayadas, en ese momento actuales campeonas, todos esperábamos una mejor versión de la delantera, histórica de Tigres y a la baja en su última campaña con América. Pero el destino le tenía reservado algo más, convertirse en leyenda del club en una sola jugada.
En el medio tiempo del partido del lunes, el desanimo de la afición rayada, sumado a la euforia y el triunfalismo de los hinchas tigres, trajeron de vuelta los fantasmas que habitan en el Estadio BBVA. Sin embargo, con tres goles en el segundo tiempo, y una portera especialista en penales; ese desanimo inicial hizo mas emotivo el sabor de la victoria sobre el acérrimo rival.
La obtención de un bicampeonato en las primeras dos temporadas de la técnica costarricense Amelia Valverde y de la defensa holandesa Merel Van Dongen, nos demuestra que no es lo mismo continuidad que continuismo, y que hay personas cuyo carácter, aura y su sola presencia, pueden cambiar la historia. Ellas, la campeona del mundo Lucía García y la internacional Pamela Tajonar, son las piezas que complementan a jugadoras ya de casa como Rebeca Bernal, Christina Burkenroad, Nicole Perez, etc.
La remontada, el Estadio BBVA como escenario, el estar frente a frente con el acérrimo rival, el penal atajado por Tajonar al minuto 84’, el gol en el último minuto anotado por una histórica de Tigres, pero rayada de sangre, corazón y familia; todo esto, hizo que la cuarta estrella sea la que más brilla.
Pero la tercera también fue épica, arrancándosela al América en el último segundo, dejando a Emilio Azcárraga Jean y a los comentaristas de Televisa tragándose el coraje desde sus asientos. Y este es nuestro bicampeonato: épico, cinematográfico.
Y todo lo que consigan las Rayadas de aquí en adelante, será edificado sobre la base de este bicampeonato. La meta: ser el equipo con mas campeonatos de la Liga MX Femenil. Sumar estrellas, y si son tan emocionantes como la segunda, ganada en penales en el Uni; la tercera, arrebatándosela al América; o la cuarta, humillando al acérrimo rival en tu casa… pues mucho mejor.