La competencia se realizó en Perú, en donde 16 participantes de distintos países ofrecieron un buen espectáculo de rimas. Sin embargo, un español se coronó por tercera vez consecutiva en la Red Bull Batalla de los Gallos
Por Mike Ramírez/ Twitter @MiguelR_G
LIMA, PERÚ.- Ante un día fresco y una multitud enloquecida por ver a los 16 competidores salir y dar lo mejor de sí, de esa manera inició la décima edición de la Internacional Batalla de los Gallos de Red Bull en la ciudad de Lima, Perú, ante 20 mil asistentes aproximadamente.
Mientras tanto, los competidores se alistaban para comenzar con el famoso sorteo de eliminatorias, en el cual cada quien tenía la oportunidad de elegir a su contrincante una vez sujetando un papel que con tinta negra marcaba su nombre. Sin duda alguna, la gente no perdía de vista a distintos participantes quienes llegaban como favoritos y terminaron eliminados en octavos de final, como el caso de ‘Aczino’ y ‘Chuty’, éste último buscando revancha contra el mexicano ‘Jonhy Beltrán’, pues en la Internacional del 2013 fue eliminado por el competidor Azteca.
Por otra parte, ‘Arkano’, campeón Internacional del 2015 y ganador del récord Guinness al lograr un día entero haciendo freestyle, comenzó a sentirse cómodo en el escenario, hasta que en semifinales se encontró con su compatriota ‘Skone’, quien por primera vez llegaba a dicha competencia.
Las miradas del público, jueces y medios de comunicación se enfocaban en los raperos más conocidos en el freestyle de habla hispana, pero sin embargo, un español que llegaba con menos apoyo que los demás competidores dio la sorpresa de la noche al eliminar a tres de los favoritos: el subcampeón del 2015 ‘Tom Crowley’ de Chile, ‘Mc Papo’ de Argentina y a ‘Arkano’ de España.
Sin embargo, ‘Skone’ llegaba a la final frente al local ‘Jota’ para poner la cereza sobre el pastel, aludiendo que el escenario tenía tintes de favoritismo local y que los gritos del público influían sobre los jueces; sin duda el español se sobrepuso ante las adversidades y logró conseguir por primera vez un título mundial.