En las salas de espera sucede la vida, pasan muchas cosas, se gestan infinidad de historias. Algunas son situaciones felices, otras dramáticas, amargas y dolorosas.
Este tema fue explorado por los integrantes de la prestigiada compañía Cuerpo Etéreo de danza contemporánea en su espectáculo DRAFT / El espacio vacío, que ayer por la tarde presentaron con éxito en el cierre de la Temporada de Danza Contemporánea 2018 en el Teatro de las Artes.
DRAFT / El espacio vacío, es una coreografía de Brisa Escobedo y Jaime Sierra con la cual la compañía celebra el 20 Aniversario de Cuerpo Etéreo.
La Temporada de Danza Contemporánea 2018 es organizada por el Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León (CONARTE), con el apoyo de la Secretaría de Cultura Federal.
Cuerpo Eterno narró por medio de su danza historias que suceden en una sala de espera, en un sillón. Así se recrearon relatos de amor, desamor, felicidad y amargura, encuentro y desencuentro, de felices llegadas y dolorosas partidas, nostalgia y violencia.
La coreografía es un desfile de imágenes muy plásticas, logradas por medio de un creativo juego de luces y sombras.
“Este espectáculo se empezó a gestar en un taller entre los integrantes de Cuerpo Etéreo, donde exploramos lo que pasa en un sofá, en una sala de espera. Allí recibimos buenas y malas noticias. Allí pasa de todo y sucede la vida”, expresó Brisa Escobedo, codirectora de Cuerpo Etéreo.
En este espectáculo bailan: Brisa Escobedo, Maru Martínez, Mayra Alarcón, Fernando Gallaga, Cesar Zetina, Jesús Garay y Samuel Guerra
La Compañía CUERPO ETÉREO se funda en 1997 en Monterrey Nuevo León, bajo la Dirección Artística y Coreográfica de Jaime Sierra y Brisa Escobedo.
Es una compañía que concentra las dosis precisas de ingenuidad y elaboración formal que crea un ambiente escénico donde los personajes entretejen sus voces corporales con sostenido dinamismo, moviéndose en un espacio que evoca lo real sin ser naturalista.
La obra de la compañía tiene características bien determinadas, entre las cuales se encuentran, un natural impulso a precipitar soluciones formales y a no demorarse excesivamente en los desarrollos, lo que los convierte en acertados dramaturgos y coreógrafos de piezas cortas, cuenta con un apreciable dominio técnico, la danza misma parece estar en el primer lugar de la compañía, se advierte unidad de grupo e independencia creativa, estilo colectivo e individual, lo cual marca una filosofía interesante de respeto al ver y el decir del otro y de integración a una estética de conjunto.
