El ataque se produjo después de que el Gobierno de Afganistán afirmara que el número de insurgentes del EI en el país es inferior a 400
Afganistán.- Al menos 36 miembros del Estado Islámico (EI) en Afganistán, murieron por el ataque en el que Estados Unidos utilizó la bomba GBU-43 , el proyectil no nuclear más potente del arsenal estadounidense, que destruyó además una importante instalación de ese grupo terrorista, informó hoy el Ministerio de Defensa afgano.
Un portavoz del Ministerio de Defensa afgano, Muhammad Radmanish, indicó que “36 miembros de grupos del EI murieron y una gran cantidad de munición y armas han sido destruidas en el bombardeo”.
En un comunicado enviado a Efe, otro portavoz del Ministerio de Defensa afgano, Dawlat Waziri, señaló que, además, un importante refugio y tres escondites del EI han sido destruidos como consecuencia del impacto de la denominada “madre de todas las bombas”.
Según el portavoz, el grupo terrorista que empezó a actuar en Afganistán en 2015 usaba ese escondite “para coordinar sus ataques terroristas en diferentes partes de la provincia” , fronteriza con Pakistán. La fuente ministerial insistió en que en el bombardeo no se han producido víctimas civiles.
El ataque se produjo después de que el Gobierno de Afganistán afirmara esta misma semana que el número de insurgentes del EI en el país es inferior a 400 y que el año pasado abatió a unos 2.500 miembros del grupo, lo que redujo su presencia a sólo dos de las 34 provincias afganas.
También la misión de la OTAN en Afganistán informó la semana pasada de que en los dos últimos años ha reducido a la mitad el número de miembros del grupo terrorista y en más de un 60 % el territorio controlado por el EI en el país.
El pasado día 6 un portavoz de la misión “Apoyo Decidido” de la OTAN, el capitán Bill Salvin, aseguró que el EI será derrotado en el país asiático durante el próximo año y que el territorio afgano no se convertirá en un lugar “ seguro ” para los combatientes del grupo terrorista.