El Partido de la Revolución Democrática (PRD), una vez considerado una pieza clave en la transición democrática de México, enfrenta su ocaso tras 35 años de historia. Jesús Zambrano, presidente nacional del PRD, anunció con tristeza que el partido del Sol Azteca no alcanzó el 3% requerido para mantener su registro nacional, lo que marca el fin de una era para la política mexicana.

Una historia de lucha y transformación

Fundado el 5 de mayo de 1989, el PRD surgió como una coalición de diversas fuerzas políticas y movimientos sociales, incluyendo el Partido Mexicano Socialista (PMS) y disidentes del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Cuauhtémoc Cárdenas, uno de los principales impulsores del partido, se convirtió en su primer candidato presidencial. Desde sus inicios, el PRD se posicionó como una fuerza de izquierda, abogando por la justicia social, la democratización del país y la defensa de los derechos humanos.

El PRD jugó un papel fundamental en la política mexicana, logrando gobernar la Ciudad de México y varios estados del país, y teniendo una representación significativa en el Congreso. Sin embargo, en los últimos años, el partido ha enfrentado retos internos y externos, incluyendo divisiones internas y la pérdida de militancia hacia otros movimientos y partidos, como el Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA).

El fin de una era

Desde la Reunión Nacional Nueva Izquierda, Jesús Zambrano aceptó que el PRD ha dejado atrás la época en que tuvo un rol importante en la política mexicana. «Ese PRD que construimos hace 35 años ya no existe más como tal, pero sigue vivo, hay que decirlo, el entusiasmo y la convicción de seguir luchando por una democracia hoy rebasada y una patria para todas y todos», declaró el 15 de junio.

Zambrano no dejó claro si tiene planes de crear un nuevo partido político, pero aseguró que la militancia perredista cuenta con lo necesario para iniciar “un nuevo ciclo”. «No puedo ocultar mi tristeza por lo que está pasando, pero hasta aquí llegamos para cerrar un ciclo y yo espero que con todo lo que significa, con todo este capital político que acumulamos tenemos para empezar un nuevo ciclo», dijo.

Además, Zambrano señaló que la situación actual del PRD representa también un cierre a nivel personal. «Se cierra el ciclo también de esas reformas enormes democráticas que el PRD ayudó a construir y se cierra un ciclo también de nuestra vida», sostuvo.

evaeg6dggve6nfxqri7zduprhuErrores en la coalición opositora

El líder del PRD también reconoció que la coalición que el Sol Azteca formó con los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI) cometió errores en las elecciones presidenciales de 2024. «La mayoría social rechazó a Xóchitl y a la coalición PRI-PAN-PRD. No nos tuvo confianza. No nos la ganamos. Ciertamente, se cometieron múltiples errores en la coalición opositora. Nunca hubo una estrategia de campaña discutida y acordada por todos: con la candidata, los partidos aliados y la representación de la sociedad civil», señaló.

INE confirma pérdida de registro del PRD

El Instituto Nacional Electoral (INE) emitió un aviso preventivo al PRD sobre la inminente pérdida de registro como partido político nacional. La medida surge después de que el partido no alcanzara el 3% de la votación federal en las elecciones del pasado 2 de junio. La Unidad Técnica de Fiscalización (UTF) del INE indicó que el PRD está ahora en una “fase de prevención”. Este procedimiento se da como consecuencia de que el Consejo General del INE debe validar los cómputos electorales, los cuales revelaron que el partido no obtuvo el respaldo popular mínimo requerido para mantener su registro.

iic2rhxinfbshke55eopxqotsuLa última palabra la tiene el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que analizará el caso y decidirá si emite una declaratoria oficial o revierte la resolución del INE. El máximo tribunal tiene hasta agosto para la resolución de las impugnaciones que pueda presentar la dirigencia del Sol Azteca. Entre tanto, la Comisión de Fiscalización del INE realizará un sorteo para conocer al interventor que llevará a cabo la liquidación del partido político.