Un nuevo peligro en Estados Unidos es la cantidad de gente que se droga al volante y causa accidentes de tránsito, tanto así que los cuerpos de rescate se han acostumbrado a suministrar un antídoto contra las sobredosis a las víctimas de choques.
Hay personas adictas a la heroína o a drogas que afines que están tan ávidas de drogarse que ingieren el estupefaciente en el automóvil, tan pronto como logran conseguir el narcótico, dicen las autoridades. A veces van manejando, caen en sobredosis en plena vía y causan accidentes.
«Ya no es como antes, que la gente compraba la droga y esperaba a llegar a la casa o a llegar a una fiesta para drogarse», dijo Scott Houston, agente policial del condado de Pamlico, Carolina del Norte. «Eso ya no se ve».
En esa localidad, una camioneta se estrelló recientemente cuando sus cuatro ocupantes sufrieron una sobredosis de heroína. Ese mismo día en Williamsport, Pensilvania, un abuelo tuvo que tomar el volante en la carretera cuando su nieto perdió el conocimiento en momentos que manejaba el auto. La policía en ese poblado de 30.000 acudió en auxilio de otras 11 sobredosis ese mismo día, incluyendo una mujer que había estrellado su auto justo antes de entrar en una carretera.
Las muertes por accidentes de tránsito causados por conductores ebrios han disminuido en 24 % desde 2006, de acuerdo con la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de Estados Unidos. Pero entretanto, las muertes en accidentes viales causados por drogas están aumentando.
En Ohio, los accidentes viales causados por drogas ascendieron a 4.615 el año pasado, un aumento de más de 21 % desde 2013, según el Departamento de Transporte del estado. Los accidentes no fueron separados por tipo de droga. En Pensilvania ocurrió un fenómeno similar: los accidentes viales causados por drogas aumentaron de 3.019 en 2011 a 4.078 el año pasado.
A nivel nacional, el número de muertes por accidentes de tránsito atribuidos a drogas subió de 2.003 en 1993 a 7.438 en 2015, según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras. Los datos solo reflejan la presencia de drogas en el conductor, no si fueron la causa del choque.
Los accidentes viales causados por drogas se han vuelto tan comunes que la policía siempre lleva consigo naloxone, el antídoto contra las sobredosis, y al llegar inmediatamente se lo administra a la víctima.
Hace dos años, Koriann Evans fue a recoger a su hijito de 2 años y a su hija de 5 de la casa de su madre, cuando recibió una llamada de su surtidor de drogas. Se inyectó en un estacionamiento en Fremont, Ohio, y comenzó a manejar. Pero a los pocos minutos no podía respirar, y a duras penas logró frenar el vehículo, en medio de la calle, antes de desmayarse. Transeúntes lograron llamar a la policía y rescatar a los chicos.
Evans, de 36 años, lleva dos años recuperada de su drogadicción y trabaja en una fábrica de láminas de vinil. Perdió la custodia sobre sus hijos, pero los ve con regularidad.
«Yo sabía que a partir de esa crisis mi vida tenía que cambiar, pues la realidad es que mi adicción casi me mata, casi mata a mis dos hijos y posiblemente a otra persona», dijo Evans.