El Estadio Universitario vivió una noche especial en la que la emoción y la nostalgia se unieron para conmemorar el 65 aniversario de los Tigres de la UANL. Grandes leyendas del equipo se dieron cita en la cancha, mientras imágenes retro y una espectacular interpretación de la Orquesta Sinfónica, acompañada por un cantante de renombre, envolvieron el ambiente en un verdadero homenaje al pasado y presente del club.

Pero más allá de la celebración, el equipo de Guido Pizarro tenía un compromiso importante: su primer partido como local al mando de los felinos. Y lo hizo con una victoria de 1-0 ante los Gallos Blancos del Querétaro, en un duelo que, aunque cerrado, sirvió para seguir afinando el nuevo sistema de juego.

Un gol tempranero que definió el rumbo

El encuentro comenzó con intensidad, y rápidamente los Tigres encontraron el gol que les daría los tres puntos. Apenas al minuto 4, una gran jugada por derecha entre Javier Aquino y Sebastián Córdova terminó con un pase preciso que Nicolás Ibáñez empujó al fondo de la red. El atacante argentino, que venía de marcar en el juego de Concachampions, empieza a recuperar la confianza y el respaldo de la afición, transformando los recientes abucheos en cánticos de apoyo.

A pesar del gol temprano, el Querétaro no modificó su estrategia. Los dirigidos por Benjamín Mora apostaron por un bloque bajo, replegando a todos sus jugadores detrás del mediocampo para evitar una goleada. Tigres, por su parte, intentó romper la muralla queretana a través del desborde de sus carrileros y la movilidad de sus volantes, pero el marcador no se movió más.

Un equipo en evolución

Guido Pizarro, en su primer once inicial en casa, apostó por una línea de cinco defensores, con Nahuel Guzmán en la portería, Aquino, Joaquim, Angulo, Sánchez Purata y Garza en la zaga; en el mediocampo Carioca, Brunetta y Córdova llevaron el control del balón, mientras que Marcelo Flores y Nicolás Ibáñez lideraron el ataque.

En la segunda mitad, ingresaron Parra, Vigón, Fulgencio y Uriel Antuna, buscando frescura en ofensiva, pero sin éxito en el marcador.

Con este triunfo, los Tigres suman 22 puntos y se consolidan en el tercer lugar de la tabla general, solo por debajo de León y América. Ahora, se preparan para una semana crucial con dos partidos importantes: el próximo fin de semana recibirán a Santos en el Volcán, y entre semana disputarán el duelo de vuelta de la Concacaf Champions Cup ante el FC Cincinnati.

La era de Guido Pizarro en el banquillo sigue tomando forma y, aunque todavía hay detalles por ajustar, los Tigres han comenzado a caminar con paso firme en esta nueva etapa.